El URO Rugby Alcorcón con pie y medio en la Segunda División B
El URO Rugby Alcorcón dejó pasar la oportunidad de certificar su permanencia en la división de plata del rugby madrileño tras su derrota ante Madrid Barbarians RFC por 17-45. Los nuestros no aprovecharon la sorprendente derrota sufrida del San Isidro ante el Torrejón para asegurarse una plaza en la Segunda División madrileña la próxima temporada. Este revés deja la salvación en una serie de carambolas que pasan, sí o sí, por hacer la machada de ganar al líder del grupo esta próxima jornada, Un MAD Rugby Boadilla que no conoce la derrota en el Grupo Permanencia.
Duro, tanto en el campo como en el ánimo, lo sufrido este pasado domingo por el URO Rugby Alcorcón ante un rival directo para la salvación como es el Madrid Barbarians RFC. Un partido controlado de principio a fin por los visitantes que les hace meterse en la pomada por la salvación. Los tigres no fueron capaces de parar el juego de los blanquinegros, que sólo se sintieron acosados a mediados de la primera parte cuando el URO se puso 12-15 tras el ensayo de Biber. De ahí en adelante estuvieron a merced en el marcador y en el juego. La falta de placaje y dirección permitió a Barbarians irse cada vez más lejos en el tanteo.
El próximo fin de semana se decidirá el Grupo Permanencia de la Segunda División. El MAD Rugby Boadilla, rival del URO Rugby Alcorcón en el último encuentro, ya tiene asegurada su plaza para la próxima temporada en la categoría de plata. Por lo tanto, son tres las plazas que quedan para cuatro equipos con opciones. Los dos combinados con más opciones son el XV Hortaleza Rojo y el Club Atlético de Rugby, que se medirán a Torrejón (fuera) y Madrid Barbarians (casa) respectivamente. De este último partido saldrá una plaza para segunda, en caso de que no haya empate. San Isidro, un punto por detrás de los tigres, recibe al colista, el Guadalajara, que cuenta con cero puntos. El URO debe ganar al líder y esperar que ocurre en Puerta de Hierro entre Baabass y atléticos o buscar segundas derivadas. Pero sin ganar a los boadillenses no habrá salvación.